Erbrecht – Derecho de sucesiones

Tarde o temprano, todo el mundo se enfrenta al fallecimiento de un familiar o de una persona cercana. A partir de ese momento, el derecho de sucesiones regula exhaustivamente la sucesión hereditaria, la posición jurídica del heredero, la posibilidad de aceptar y rechazar una herencia y, si se forma una comunidad de herederos, la relación entre los coherederos.

Además, regula lo que se denomina «sucesión voluntaria», que pretende ser un complemento de la sucesión intestada y permite al causante realizar sus deseos individuales en forma de testamentos, contratos sucesorios, etc.

Esto incluye la creación y anulación de un testamento, el testamento conjunto de los cónyuges, en particular el testamento berlinés, la designación de herederos como herederos anteriores y posteriores y el legado, que solo se refiere a determinados objetos. El derecho de sucesiones se completa con el valor correspondiente del patrimonio hereditario, la inhabilitación para heredar, el procedimiento de certificado sucesorio y la compra de herencia.

En el caso de los cónyuges casados, el derecho de sucesiones a menudo se solapa con el derecho de familia en el contexto de un testamento. Si los cónyuges no han pensado en el reparto legal de los bienes adquiridos durante el matrimonio, las disposiciones legales sobre la liquidación del régimen de gananciales pueden resultar relevantes, ya que el fallecimiento de uno de los cónyuges también pone fin al matrimonio. La división de los bienes creados durante el matrimonio puede dificultar la liquidación de la herencia.

En caso de herencia pueden plantearse varias cuestiones, por ejemplo:

• rechazo de la herencia
• impugnación de un testamento
• adquisición de un certificado de herencia
• aseguramiento de las cuentas del causante
• ejecución de testamentos o administración de herencias
• arreglos en la comunidad de herederos y su liquidación
• acciones judiciales para obtener información sobre la herencia

A menudo se plantean exigencias excesivas, sobre todo para el cónyuge supérstite, ya que puede resultar más favorable rechazar la herencia que aceptarla. En cualquier caso, conviene buscar asesoramiento jurídico, ya que la ley prevé básicamente dos opciones diferentes. Estas opciones se conocen como la solución en virtud del derecho de sucesiones y la solución en virtud del derecho matrimonial. En ambos casos, el importe de la herencia y el importe de la liquidación del régimen de gananciales deben determinarse caso por caso.

Para establecerlo, a menudo hay que presentar una demanda de información ante los tribunales con el fin de obtener información más detallada. El procedimiento correspondiente se denomina entonces demanda por etapas.

Esto se debe a que el primer paso consiste en reclamar información sobre la existencia del caudal relicto; a continuación, puede ser necesario asegurar esta información mediante una declaración jurada para evitar fraudes y solo en el último paso se hace valer la reclamación concreta mediante una demanda.

Sin embargo, también pueden surgir litigios en otros casos. Por ejemplo, si los herederos son repentinamente considerados responsables de antiguas deudas del difunto o se espera que terceros entreguen algo al heredero porque han tomado algo de la herencia o se creen herederos. En este contexto, el certificado de herencia es de vital importancia, ya que acredita la condición de heredero y a menudo debe hacerse valer en un procedimiento contencioso.

Por supuesto, también hay casos de herencia con una dimensión internacional. Incluso un caso sencillo en el que, por ejemplo, un ciudadano italiano se ha casado con una alemana puede dar lugar a dificultades considerables. En ese caso, es aconsejable incluir una cláusula de elección de ley en el testamento para especificar el país según cuyas disposiciones legales debe liquidarse la herencia.